Segun Paul Ekman, Ph.D. No todos lo hacen.
• "No puedo hablar ahora, justo en la salida de la puerta"
• "Me encanta tu vestido nuevo"
• "¡Qué gran noche, muchas gracias”
• "Lo siento, no podía conseguir una niñera"
Tales mentiras de la vida cotidiana suelen darse, sin ser detectadas debido a que el objetivo en estos casos es querer quedar bien.
Sería descortés si se dijera la verdad:
• Yo no quiero hablar con usted ahora, o ninguna vez.
• El vestido es totalmente inadecuado para alguien de su edad, y el color es muy feo.
• La comida estuvo aburrida y mas encima de la empresa peor.
• No quiero perder otra oportunidad.
Y, también sería descortés si el objetivo fuese cuestionado diciendo la verdad.
Otra razón es que las mentiras son tan triviales, si no hay nada en juego..., el mentiroso no espera ser descubierto, como no espera ser interrogado, no tiene miedo. Si por accidente, más tarde se descubrió la verdad que no había dicho, por lo que había dicho se excusa, y no pasa nada mas.
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Blog Emocional
domingo, 31 de enero de 2010
martes, 19 de enero de 2010
Continuación Autoestima
RECONOCERSE, ACEPTARSE, QUERERSE...
"Amarse significa reconocer la propia valía y el trabajo bien hecho y considerarse tan importante como los demás. En ello radica el verdadero triunfo en la vida, en reconocernos, aceptarnos y querernos tal y como somos".
Para sacar a la luz todo muestro potencial como personas, es decir el "triunfador" que todos llevamos dentro, lo primero es aprender a conocerse y reconocerse.
Para acabar con la insatisfacción hay que aceptarse, reconociendo y asumiendo nuestras debilidades y defectos, pero también descubriendo que poseemos muchas cualidades y virtudes.
Aceptarse y vivir de acuerdo los propios valores, en lugar de traicionarse y seguir los principios ajenos, además de fijarse objetivos, comprometerse con ellos y trabajar para conseguirlos, son ingredientes clave del éxito, porque "la actividad mantiene en buena forma el amor propio".
Por otra parte, en lugar de autocriticarse, hay que hacerse consciente de que los reproches que uno se hace a sí mismo suelen ser los que le hacían sus padres. Hay que mantenerlos a raya.
También es importante, aprender a decir no sin agresividad, a pedir algo sin dar falsas excusas, a responder a las críticas sin perder la calma.
Hay que dejar de lado las relaciones poco satisfactorias y apoyarse en las saludables, que ayudarán a cambiar la propia vida. Mientras más uno se valore -aunque sin caer en el narcisismo- más le querrán y valorarán los demás.
"Emplear la energía que uno invierte en convencerse de que "es incapaz" en pensar que "puede hacerlo", y explorar y explotar los propios talentos que permanecen desaprovechados, es un excelente recurso para valorarse más. La idea es llevar a la práctica esa aptitud, expandir la creatividad y el disfrute, para así alejarse de la insatisfacción".
Y lo último pero no por ello menos importante, es "evitar culparse continuamente. Asumir la culpa de todo es uno de los peores maltratos que uno puede autoinfligirse. Hay que sopesar la influencia de otras causas y personas en la responsabilidad y origen de los sucesos".
www.CarlosCorreaCoaching.com
"Amarse significa reconocer la propia valía y el trabajo bien hecho y considerarse tan importante como los demás. En ello radica el verdadero triunfo en la vida, en reconocernos, aceptarnos y querernos tal y como somos".
Para sacar a la luz todo muestro potencial como personas, es decir el "triunfador" que todos llevamos dentro, lo primero es aprender a conocerse y reconocerse.
Para acabar con la insatisfacción hay que aceptarse, reconociendo y asumiendo nuestras debilidades y defectos, pero también descubriendo que poseemos muchas cualidades y virtudes.
Aceptarse y vivir de acuerdo los propios valores, en lugar de traicionarse y seguir los principios ajenos, además de fijarse objetivos, comprometerse con ellos y trabajar para conseguirlos, son ingredientes clave del éxito, porque "la actividad mantiene en buena forma el amor propio".
Por otra parte, en lugar de autocriticarse, hay que hacerse consciente de que los reproches que uno se hace a sí mismo suelen ser los que le hacían sus padres. Hay que mantenerlos a raya.
También es importante, aprender a decir no sin agresividad, a pedir algo sin dar falsas excusas, a responder a las críticas sin perder la calma.
Hay que dejar de lado las relaciones poco satisfactorias y apoyarse en las saludables, que ayudarán a cambiar la propia vida. Mientras más uno se valore -aunque sin caer en el narcisismo- más le querrán y valorarán los demás.
"Emplear la energía que uno invierte en convencerse de que "es incapaz" en pensar que "puede hacerlo", y explorar y explotar los propios talentos que permanecen desaprovechados, es un excelente recurso para valorarse más. La idea es llevar a la práctica esa aptitud, expandir la creatividad y el disfrute, para así alejarse de la insatisfacción".
Y lo último pero no por ello menos importante, es "evitar culparse continuamente. Asumir la culpa de todo es uno de los peores maltratos que uno puede autoinfligirse. Hay que sopesar la influencia de otras causas y personas en la responsabilidad y origen de los sucesos".
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lunes, 18 de enero de 2010
Hoy Es El Día Más Depresivo Del Año
Hoy es el día más depresivo del año
La gente ve cómo sus resoluciones de este nuevo año están comenzando a fallar; en su peso, deudas…sumadas a las condiciones atmosféricas, la llevan a un pick en la depresión, y sin considerar los desastre naturales que estamos recién experimentando – Haiti.
Poetas, publicistas y los siquiatras todos tienen a este día como su candidato para decir que es la época más triste del año.
Según una ecuación ideada por el Dr. Cliff Arnall, un investigador británico de la Universidad de Cardiff, el 18 de enero del 2010 es el día más depresivo en gran parte del mundo. Su fórmula para esta predicción triste considera factores como la pesada deuda post fiestas de fin de año, fallos en las resoluciones del Año Nuevo y, este año particularmente, el frío repugnante que ha alcanzado a esta parte del mundo mucho mayor a lo que se registra generalmente. Como ya dije también las lamentables noticias de nuestros hermanos haitianos.
Este pick es particular en el desorden afectivo estacional, tristeza (SAD) no es la única vez que nos da esta sensación propensa a la baja o a sentir un bajón.
Las investigaciones también indican que las nuevas prescripciones de antidepresivos se dan más alrededor del día de acción de gracias y las tasas de suicidio son más altas durante la primavera.
Si abril es un mes difícil para su estado de ánimo, éste se correlaciona a la opción de T.S. Eliot, que lo caracteriza como " el mes más cruel”;
¿Entonces qué puede hacer usted si está sintiendo el invierno muy gris - y cómo sabe cuándo debe buscar ayuda?
Identificando las señales de la depresión:
El doctor Michael Terman, Ph.D., Director del Centro para el Tratamiento Rápido y de Ritmos Biológicos del Centro Médico de la Universidad de Columbia, señala; “la mayoría de la gente que tiene sensación de depresión de invierno se siente fatigada durante el día, se levanta con dificultad de la cama para ir al trabajo, y comienzan a tener antojos e incluso a engullir (tragar la comida atropelladamente y sin mascarla) más carbohidratos que los recomendados. Pero eso puede también suceder con la depresión no estacional. Como sea estacional o no, vemos generalmente que el funcionamiento de su trabajo y la concentración son reducidos, sienten pocos deseos de socializar, baja en el apetito sexual, ansiedad subyacente, sin mencionar la desesperación.”
Carlos Correa Coaching Emocional
CarlosCorreaCoaching.com
La gente ve cómo sus resoluciones de este nuevo año están comenzando a fallar; en su peso, deudas…sumadas a las condiciones atmosféricas, la llevan a un pick en la depresión, y sin considerar los desastre naturales que estamos recién experimentando – Haiti.
Poetas, publicistas y los siquiatras todos tienen a este día como su candidato para decir que es la época más triste del año.
Según una ecuación ideada por el Dr. Cliff Arnall, un investigador británico de la Universidad de Cardiff, el 18 de enero del 2010 es el día más depresivo en gran parte del mundo. Su fórmula para esta predicción triste considera factores como la pesada deuda post fiestas de fin de año, fallos en las resoluciones del Año Nuevo y, este año particularmente, el frío repugnante que ha alcanzado a esta parte del mundo mucho mayor a lo que se registra generalmente. Como ya dije también las lamentables noticias de nuestros hermanos haitianos.
Este pick es particular en el desorden afectivo estacional, tristeza (SAD) no es la única vez que nos da esta sensación propensa a la baja o a sentir un bajón.
Las investigaciones también indican que las nuevas prescripciones de antidepresivos se dan más alrededor del día de acción de gracias y las tasas de suicidio son más altas durante la primavera.
Si abril es un mes difícil para su estado de ánimo, éste se correlaciona a la opción de T.S. Eliot, que lo caracteriza como " el mes más cruel”;
¿Entonces qué puede hacer usted si está sintiendo el invierno muy gris - y cómo sabe cuándo debe buscar ayuda?
Identificando las señales de la depresión:
El doctor Michael Terman, Ph.D., Director del Centro para el Tratamiento Rápido y de Ritmos Biológicos del Centro Médico de la Universidad de Columbia, señala; “la mayoría de la gente que tiene sensación de depresión de invierno se siente fatigada durante el día, se levanta con dificultad de la cama para ir al trabajo, y comienzan a tener antojos e incluso a engullir (tragar la comida atropelladamente y sin mascarla) más carbohidratos que los recomendados. Pero eso puede también suceder con la depresión no estacional. Como sea estacional o no, vemos generalmente que el funcionamiento de su trabajo y la concentración son reducidos, sienten pocos deseos de socializar, baja en el apetito sexual, ansiedad subyacente, sin mencionar la desesperación.”
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jueves, 14 de enero de 2010
Trastorno Afectivo Estacional - SAD ?
¿Qué es el trastorno afectivo estacional (SAD, por sus siglas en inglés)?
Es un tipo de depresión que afecta a una persona durante la misma temporada cada año. Si se deprime en invierno, pero se siente mucho mejor en primavera y en verano, es posible que tenga SAD.
Cualquiera puede tener SAD, pero es más común en:
-Personas que viven en zonas donde los días en el invierno son muy cortos o hay grandes cambios en la cantidad de luz del día en las diferentes estaciones.
-Mujeres.
-Personas entre los 15 y los 55 años de edad. El riesgo de tener el SAD por primera vez disminuye a medida que envejece.
-Personas que tienen un pariente cercano con SAD.
¿Qué causa el SAD?
No hay seguridad de qué causa el SAD, pero se cree que puede ser provocado por la falta de luz solar. La falta de luz puede alterar su ciclo sueño-vigilia, o los ritmos circadianos. O puede causar problemas con un químico del cerebro llamado serotonina que afecta el estado de ánimo.
¿Cuáles son los síntomas?
-Si tiene SAD, es posible que:
-Se sienta triste, gruñón, malhumorado o ansioso.
-Pierda interés en las actividades diarias.
-Coma y ansíe más carbohidratos, como pastas y pan.
-Aumente de peso.
-Duerma más y se sienta somnoliento durante el día.
Los síntomas aparecen y desaparecen aproximadamente en la misma época cada año. Para la mayoría de las personas con SAD, los síntomas comienzan en septiembre u octubre y finalizan en abril o mayo.
¿Cómo se diagnostica el SAD?
A veces puede ser difícil saber la diferencia entre la depresión y el SAD, debido a que muchos de los síntomas son iguales. Para diagnosticar el SAD, su médico querrá saber si:
-Ha estado deprimido durante la misma temporada y ha mejorado cuando cambian las estaciones por lo menos 2 años seguidos.
-Tiene síntomas que a menudo se presentan con el SAD, como, por ejemplo, estar muy hambriento (especialmente con ansias de carbohidratos), subir de peso y dormir más de lo habitual.
-Un familiar cercano (alguno de los padres, hermano o hermana) ha tenido el SAD. Continuará...
www.CarlosCorreaCoaching.com
Es un tipo de depresión que afecta a una persona durante la misma temporada cada año. Si se deprime en invierno, pero se siente mucho mejor en primavera y en verano, es posible que tenga SAD.
Cualquiera puede tener SAD, pero es más común en:
-Personas que viven en zonas donde los días en el invierno son muy cortos o hay grandes cambios en la cantidad de luz del día en las diferentes estaciones.
-Mujeres.
-Personas entre los 15 y los 55 años de edad. El riesgo de tener el SAD por primera vez disminuye a medida que envejece.
-Personas que tienen un pariente cercano con SAD.
¿Qué causa el SAD?
No hay seguridad de qué causa el SAD, pero se cree que puede ser provocado por la falta de luz solar. La falta de luz puede alterar su ciclo sueño-vigilia, o los ritmos circadianos. O puede causar problemas con un químico del cerebro llamado serotonina que afecta el estado de ánimo.
¿Cuáles son los síntomas?
-Si tiene SAD, es posible que:
-Se sienta triste, gruñón, malhumorado o ansioso.
-Pierda interés en las actividades diarias.
-Coma y ansíe más carbohidratos, como pastas y pan.
-Aumente de peso.
-Duerma más y se sienta somnoliento durante el día.
Los síntomas aparecen y desaparecen aproximadamente en la misma época cada año. Para la mayoría de las personas con SAD, los síntomas comienzan en septiembre u octubre y finalizan en abril o mayo.
¿Cómo se diagnostica el SAD?
A veces puede ser difícil saber la diferencia entre la depresión y el SAD, debido a que muchos de los síntomas son iguales. Para diagnosticar el SAD, su médico querrá saber si:
-Ha estado deprimido durante la misma temporada y ha mejorado cuando cambian las estaciones por lo menos 2 años seguidos.
-Tiene síntomas que a menudo se presentan con el SAD, como, por ejemplo, estar muy hambriento (especialmente con ansias de carbohidratos), subir de peso y dormir más de lo habitual.
-Un familiar cercano (alguno de los padres, hermano o hermana) ha tenido el SAD. Continuará...
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domingo, 10 de enero de 2010
martes, 5 de enero de 2010
Autoestima
Algunas personas aparentemente lo tienen todo: belleza, inteligencia, dinero, capacidades, salud, buenas relaciones, pero no están satisfechas consigo mismas e, incluso, parecen envidiar a los demás.
En cambio otras, a quienes la vida o la genética, les ha sonreído mucho menos y parecen haberle negado o entregado con cuentagotas la mayoría de las cualidades y atributos de otra gente afortunada, parecen sentirse felices a gusto "dentro de su propia piel" y orgullosas de la marcha de su vida y obra.
La diferencia entre unas y otras no radica en las propias personas, ni en sus luces y sombras, sino en la imagen que les devuelve el espejo donde se miran: la percepción que tienen de sí mismas. Algunas apenas se valoran o, directamente, se detestan a sí mismas, mientras que otras se quieren mucho, quizás demasiado.
"El sentimiento de aceptación y amor hacia uno mismo, va unido al sentimiento de competencia y valía personal. La idea que una persona tiene de sí, la percepción que tenemos de nosotros. Ese es el núcleo central de la personalidad y determina la conducta".
"El "amor propio" o cariño a uno mismo es el "motor" de la persona, lo que la impulsa a seguir adelante y motiva a conseguir lo que nos proponemos. Es un sentimiento positivo, generador de confianza y entusiasmo, que contribuye a la realización, felicidad y éxito personal y social de todo individuo".
"Algunas personas parecen quererse "en exceso", incurriendo a menudo en la prepotencia, aunque esta actitud suele ser en realidad una "máscara" que adoptan para encubrir el poco aprecio que sienten por ellos mismos".
Quien agrega que la excesiva complacencia al considerar las facultades y obras propias se relaciona con conductas negativas, como el egocentrismo o exaltación exagerada de la propia personalidad, la vanidad, el egoísmo, la ambición desmedida, la temeridad, los delirios de grandeza o el perfeccionismo a ultranza.
"Se trata de ese tipo de personas que siempre tienen razón, son los mejores y consideran incompetentes a los demás".
Pero lo más frecuente es que la autovaloración flaquee, causando desde sentimientos de inferioridad y limitaciones hasta desarreglos psicoemocionales y conductas desadaptadas.
"Pese a contar con un ambiente favorable y no tener trabas ni enemigos para conseguir lo que quieren, muchas personas se sienten infelices y se castigan privándose de oportunidades".
Ese tipo de personas ensalzan las virtudes ajenas y perdonan a los demás los errores y defectos, pero son injustas y exigentes con ellas mismas. Esta conducta produce una profunda amargura que conduce hacia la depresión y la neurosis. Las energías de la persona no funcionan aliadas para demostrar sus aptitudes, porque una parte de su conciencia funciona como enemigo interior.
"Quien no se considera digno de cariño y sin cualidades se siente culpable, con inseguridad y vergüenza y mira hacia su entorno con pesimismo".
"Quererse implica aceptar los propios defectos, fracasos y decepciones, mostrándose indulgente con uno mismo. También significa otorgarse la aprobación que se necesita en vez de necesitar constantemente la aprobación de los demás, y disfrutar de los mismos derechos "que concedo a los otros", continuará…
www.CarlosCorreaCoaching.com
En cambio otras, a quienes la vida o la genética, les ha sonreído mucho menos y parecen haberle negado o entregado con cuentagotas la mayoría de las cualidades y atributos de otra gente afortunada, parecen sentirse felices a gusto "dentro de su propia piel" y orgullosas de la marcha de su vida y obra.
La diferencia entre unas y otras no radica en las propias personas, ni en sus luces y sombras, sino en la imagen que les devuelve el espejo donde se miran: la percepción que tienen de sí mismas. Algunas apenas se valoran o, directamente, se detestan a sí mismas, mientras que otras se quieren mucho, quizás demasiado.
"El sentimiento de aceptación y amor hacia uno mismo, va unido al sentimiento de competencia y valía personal. La idea que una persona tiene de sí, la percepción que tenemos de nosotros. Ese es el núcleo central de la personalidad y determina la conducta".
"El "amor propio" o cariño a uno mismo es el "motor" de la persona, lo que la impulsa a seguir adelante y motiva a conseguir lo que nos proponemos. Es un sentimiento positivo, generador de confianza y entusiasmo, que contribuye a la realización, felicidad y éxito personal y social de todo individuo".
"Algunas personas parecen quererse "en exceso", incurriendo a menudo en la prepotencia, aunque esta actitud suele ser en realidad una "máscara" que adoptan para encubrir el poco aprecio que sienten por ellos mismos".
Quien agrega que la excesiva complacencia al considerar las facultades y obras propias se relaciona con conductas negativas, como el egocentrismo o exaltación exagerada de la propia personalidad, la vanidad, el egoísmo, la ambición desmedida, la temeridad, los delirios de grandeza o el perfeccionismo a ultranza.
"Se trata de ese tipo de personas que siempre tienen razón, son los mejores y consideran incompetentes a los demás".
Pero lo más frecuente es que la autovaloración flaquee, causando desde sentimientos de inferioridad y limitaciones hasta desarreglos psicoemocionales y conductas desadaptadas.
"Pese a contar con un ambiente favorable y no tener trabas ni enemigos para conseguir lo que quieren, muchas personas se sienten infelices y se castigan privándose de oportunidades".
Ese tipo de personas ensalzan las virtudes ajenas y perdonan a los demás los errores y defectos, pero son injustas y exigentes con ellas mismas. Esta conducta produce una profunda amargura que conduce hacia la depresión y la neurosis. Las energías de la persona no funcionan aliadas para demostrar sus aptitudes, porque una parte de su conciencia funciona como enemigo interior.
"Quien no se considera digno de cariño y sin cualidades se siente culpable, con inseguridad y vergüenza y mira hacia su entorno con pesimismo".
"Quererse implica aceptar los propios defectos, fracasos y decepciones, mostrándose indulgente con uno mismo. También significa otorgarse la aprobación que se necesita en vez de necesitar constantemente la aprobación de los demás, y disfrutar de los mismos derechos "que concedo a los otros", continuará…
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viernes, 1 de enero de 2010
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